SANTO DOMINGO. La conmemoración del 17 aniversario del fallecimiento de José Francisco Peña Gómez, uno de los principales líderes políticos del pasado siglo, servirá para reunir ante su tumba a sus antiguos compañeros, quienes hoy día están divididos entre los partidos Revolucionario Dominicano (PRD) y Revolucionario Moderno (PRM).
Los actos iniciarán esta mañana con una misa en la iglesia de Las Mercedes a las 10:00 a.m., la cual encabezará el presidente del PRD, Miguel Vargas Maldonado, quien estará acompañado por la presidenta en funciones, Peggy Cabral, viuda de Peña Gómez, así como su hijo Tony Peña Guaba, secretario general del partido.
Para el domingo 10, a las 10:00 a.m., una comisión encabezada por la viuda de Peña Gómez y otra del PRM integrada por Hipólito Mejía, Luis Abinader, Andrés Bautista y Jesús Vásquez, coincidirán ante su tumba para rendirle tributos. Vargas Maldonado no asistirá, porque estará fuera del país en una reunión de la Internacional Socialista (IS).
Esta sería la primera vez que coinciden los ex compañeros en los actos de recordación de su líder, dado a que después de la convención del PRD del 2011, las actividades las realizaban por separado. También contemplan desarrollar ya por separado misas, conferencias y tertulias, en los diferentes municipios.
Peña Gómez ha sido considerado uno de los líderes políticos más valorado a nivel nacional e internacional, llegando a fungir como vicepresidente mundial y presidente para América Latina de la Internacional Socialista.
A decir de Ivelisse Prats de Pérez, ex presidenta del PRD, y quien hoy día forma parte del PRM, la división que afectó a los perredeístas no hubiese sucedido si Peña Gómez estuviera vivo.
“En vida de Peña Gómez no se hubiera tenido que producir este desprendimiento doloroso, de un gran grupo de perredeístas que no podíamos convivir con la situación que se creó producto del Pacto de las Corbatas Azules”, aseguró.
A su juicio, el extinto líder habría advertido a tiempo la situación, y tomado medidas condignas.
“Habría cambiado tal vez la orientación de las expulsiones, y tal vez hoy sería Miguel Vargas Maldonado quien estuviera fuera del PRD”, sostuvo Prats de Pérez.
Afirma que si Peña Gómez estuviera vivo hoy, formaría parte de las filas del PRM; “porque nosotros nos fuimos, pero nos llevamos su enseñanza y su ideología”.
El líder histórico del PRD falleció el 10 de mayo de 1998, en su casa de Cambita, Garabitos, San Cristóbal, 6 días antes de las elecciones congresionales y municipales en las que aspiraba volver a ser alcalde del Distrito Nacional. Se consideró que esos comicios fueron un tributo a su memoria, pues fueron ganadas abrumadoramente por el PRD.
Sus funerales fueron ocasión de una gran manifestación de dolor popular, donde el pueblo por tres días le rindió tributos.
El entonces presidente de la IS, Pierre Mauroy, señaló que Peña Gómez había sido “uno de los más fervientes defensores de nuestros ideales en la República Dominicana y en el mundo, y uno de nuestros grandes líderes”.
Sobre José francisco peña Gómez
Peña Gómez encabezó movimientos que reclamaban un cambio político, aglutinando frentes políticos electorales en varios momentos históricos. Fue alcalde de Santo Domingo en el período 1982-86, candidato presidencial en tres ocasiones 1990, 1994, 1996. Tras el fraude de las elecciones de 1994, llamó a una huelga general ampliamente apoyada por sus seguidores y, después de una protesta internacional, el entonces presidente Joaquín Balaguer, convocó a nuevas elecciones en 1996. Peña Gómez ganó la primera vuelta electoral, pero fue derrotado en la segunda vuelta por Leonel Fernández.
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