El juez Alejandro Vargas, de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, impuso este lunes un año d prisión como medida de coerción contra Víctor Alexander Portorrreal, acusado de asesinar a su pareja y a sus tres hijastros.
La medida deberá ser cumplida en la cárcel de San Pedro de Macorís.
La medida le fue impuesta acogiendo el pedido de la fiscal del Distrito Nacional, Yeni Berenice Reynoso, en representación del Ministerio Público. La magistrada dijo que en sus años de ejercicio nunca había visto una escena tan dantesca, al referirse al escenario de los asesinatos.
El magistrado al motivar su decisión, calificó al imputado de psicópata y le preguntó en varias ocasiones qué sentía al momento de cometer los asesinatos. También le preguntó si él se sentía que era un ser humano, por la forma en que había actuado. De igual modo, lo puso a ver un video en el que una de las niñas que presuntamente ultimó sale cantando muy alegre.
Durante la audiencia la defensa del imputado, a cargo de un defensor público, pidió que no se conociera la medida alegando que a éste se le habían violentado derechos fundamentales. También pidió que el acusado fuera sometido a una evaluación psiquiátrica.
Durante el proceso, Daniel Bodder, padre de los niños asesinados, tuvo que abandonar la audiencia, ya que no pudo soportar el relato de la fiscal de cómo ocurrieron los hechos.
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